La formación interactiva e inmersiva llega con REM Experience

Formación con simulación 3D

Las nuevas tecnologías han multiplicado de manera exponencial el acceso a la formación para los estudiantes y las personas trabajadoras, y además han introducido importantes novedades en las metodologías formativas. En este sentido, las personas que quieren o necesitan formarse demandan hoy en día formaciones interactivas y dinámicas que resulten motivadoras y les permitan alcanzar un aprendizaje significativo. Por eso en REM Experience somos especialistas en el desarrollo de simuladores para la formación, la nueva herramienta que permite realizar formaciones exitosas, adaptadas a las nuevas demandas sociales.

La metodología tradicional a través monótonos pdf acompañados de algunos videos ha quedado atrás al evidenciarse que todo aquello que se practica por uno mismo se aprende mucho mejor que lo que simplemente se lee o se escucha. Es decir, que la experimentación en primera persona es un factor clave para garantizar el éxito de cualquier formación que, sin embargo, resulta difícil de garantizar en las formaciones convencionales.

FORMACIÓN CON SIMULACIONES 3D

Con el avance las nuevas tecnologías la solución llega a través de las simulaciones 3D para la formación, que son cada vez más habituales en el mercado debido a sus múltiples beneficios. De hecho, las simulaciones 3D permiten a los centros formativos y las empresas que deben formar a sus trabajadores recrear entornos reales para que las personas puedan realizar sesiones interactivas y motivadoras en cualquier momento y lugar, contando simplemente con un ordenador o una tablet. Y además, permiten experimentar en un entorno seguro, logrando un importante ahorro de costes.

La formación a través de simulaciones 3D permite a los alumnos repetir la práctica de forma ilimitada, aprendiendo a través de los propios aciertos y errores, y lograr, por tanto, un aprendizaje significativo a través de la interacción y la experimentación.

En REM Experience hemos desarrollado simuladores que permiten formar a inspectores de vehículos, alumnos de mecánica náutica o profesores de manera homologada y exitosa, y constatamos como aumenta actualmente la demanda de estas nuevas herramientas tecnológicas.

De hecho, hace unos años este tipo de simuladores se desarrollaban principalmente para evitar prácticas que suponían elevados riesgos en entornos reales pero ahora se han generalizado en sectores muy diversos al constatar que la motivación del alumno y el aprendizaje mejora de manera considerable frente a la metodología convencional en la que los alumnos tienen que memorizar mucha información pero en las que no pueden intervenir, tomar decisiones o poner en práctica los conocimientos aprendidos de una forma ágil.

LEARNING BY DOING

Por eso parte del éxito del aprendizaje interactivo a través de estas simulaciones 3D radica en el learning by doing, es decir, el aprendizaje a través de la metodología ensayo-error. Y además, permiten aprender más rápido, ya que en lugar de seguir el procedimiento clásico, en el que primero se explican los principios y luego se ofrecen casos particulares a modo de ejercicios aislados, estas simulaciones plantean situaciones concretas que permiten deducir los principios estudiados.

Con todo, la formación a través de simulaciones 3D conlleva un notable ahorro de costes para la empresa o entidad que las imparte puesto que los alumnos pueden estudiar de manera presencial u online, sin necesidad de contar con un tutor o profesor de manera presencial, y además no requieren contar con entornos reales preparados para la práctica.

De hecho, en el contexto actual es imprescindible contar con herramientas e-Learning que garanticen que la formación podrá desarrollarse con las mismas garantías tanto de manera presencial como remota.

Al finalizar cada sesión, tanto el alumno como la entidad formadora reciben las métricas de cada participante (el tiempo dedicado a la formación, aciertos y errores, nota final…) de manera que puede realizarse un seguimiento completo y evaluar a cada alumno desde el propio simulador.

Por eso este tipo de formaciones a través de simulaciones 3D va en aumento de la mano de aquellas empresas y entidades formadoras que comprenden el enorme potencial de estas herramientas tecnológicas para la formación.